Ayer durante un almuerzo familiar, saqué mi apreciada agenda de papel y por supuesto, no pasó desapercibida.
La pregunta que me han hecho ya tantas veces, no se hizo esperar: ¿Por qué no usas el calendario de tu iPad o teléfono? Y mi respuesta es siempre la misma:
Durante mucho tiempo escribí en mi teléfono la lista de las cosas que tenía que hacer, y a medida que las iba haciendo las iba borrando. Sin embargo, cuando llegaba la noche frecuentemente sentía que no había hecho nada durante el día y que había sido un día perdido.
Esa sensación de día perdido y desaprovechado me producía una gran frustración. Sentía que seguía donde mismo y que no había avanzado en mis proyectos ni obligaciones.
Unos días más tarde, después de un día agotador en el que no había parado desde que me había levantado y en el que había hecho muchísimas cosas, me di cuenta que al haberlas borrado, también las había borrado de mi conciencia. Las había olvidado.
Entonces, pensé que si en vez de escribirlas y borrarlas en mi teléfono, las escribía y tachaba en un papel, tendría la satisfacción de haber cumplido mi misión del día.
Fue así como después de muchos años, partí a una librería y revisé todas las agendas de papel que ofrecía el mercado. Me fijé en tamaños, pesos, colores, tipografía y estilos. Las miré todas buscando la que más se adecuara a mis necesidades y gusto.
Mi exhaustiva investigación me llevó a escoger la agenda "DO IT ALL MOM PLANNER" que llevo usando varios años ya.
Para los que tienen la "suerte" de verla, notarán que cada día tiene muchas actividades escritas, e incluyendo hasta las del día de hoy, prácticamente todas ellas están tachadas. Y ¡tacharlas es lo máximo!
Los invito a escribir lo mucho o poco que tengan que hacer y a tacharlo después. La sensación de misión cumplida, no sólo les producirá felicidad sino también una satisfacción difícil de igualar!